Para nosotros es de esperar que una industria tan intensiva en información como lo es la de la salud, demande considerablemente más inversión en tecnología por cada dólar gastado para impulsar la atención especializada para los pacientes, así como para gestionar las decisiones de la organización. Pero no en este nivel y no en este alcance. Las organizaciones de atención médica pagan más por todo tipo de tecnología, desde las aplicaciones financieras de Lawson, las licencias de productividad de escritorio de Microsoft, los equipos de red de Cisco, los servidores de IBM, las matrices de almacenamiento de EMC, y más. La amplitud del alcance de esta "prima sanitaria" indica que esta no es una diferencia específica de la industria para un tipo de tecnología exclusiva de atención médica, sino más bien una prima general de toda la tecnología.